Piel con piel
El bebé nace totalmente indefenso. Necesita a su madre para sobrevivir: su alimento, sus brazos, su cuerpo, su temperatura, su sonido, su presencia… Cuando el bebé está sobre el cuerpo de su madre, se siente seguro, sabe que está a salvo y puede relajarse. Hoy hablamos de ese contacto piel con piel, que hasta suena como un tratamiento médico y que en realidad es lo que la humanidad viene reproduciendo durante toda su existencia, porque forma parte de nuestra supervivencia…